Se
cuela el silencio acompañado
de
un humor salobre.
El
corazón late acelerado.
El
rumbo nuevo es incierto.
Las
manos se humedecen mezclando los presagios.
Ay
del que reniega del momento justo
donde
se cruzan los sueños y la dicha,
Y
no se valora la fe
envuelta
en los dorados reflejados sobre el mar,
se
recibe la palabra
desde
el recodo de las alegrías embravecidas.
Se
mecen las estrellas sobre las olas
haciendo
sonreír a la luna.
Destellos
de plata hacen brillar la dermis de la fantasía
donde
un personaje misterioso canta en la orilla
haciendo
reír a las sirenas.
Ha
llegado la barca
Y
en el corazón hay júbilo
cubierto
con el frío de la confusión.
Carmen Amaralis Vega Olivencia
www.carmenamaralis-vega.com.ve
Carmencita querida, como todo lo que escribes esta es otra joya. Siempre con un sabor a misterio o a quién es él. Te felicito. Eres muy especial en nuestras vidas. Un abrazo y muchas bendiciones.
ResponderEliminarMuchas gracias mi querido amigo poeta, bendiciones luminosas, Amaralis
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