Por algún extraño azar
choqué con la belleza…
Qué decir de sus formas
si eran perfectas…
Qué de su esencia si era plena…
Cómo pretender tornar sus colores
cuando lucían incandescentes…
Entonces traté de entender
pero no hubo nadir ni ocaso alguno
tan sólo sentir el rumor del río surcando el cauce
cual hojas en murmullo al viento
y la tersura de sus manos
llevándome por el parque…
Aún ahora
poco entiendo de la belleza
cuando atrevida y coqueta
cruza frente a mí…
TIERNO POEMA
ResponderEliminarHermoso poema, gracias
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