Vi a una chica,
me enamoré.
Soñé...
Hijos, nietos,
Todo un mundo propio.
Me acerqué a ella
y le dije,
«Estoy enamorado de ti,
no dejaré que nadie más te
tenga».
«De acuerdo», dijo ella, y
nos casamos...
Ella se había enamorado de
mis zapatos.
Estambul, Turquía
0 comentarios :
Publicar un comentario