Anoche apareció un árbol en la plaza
y hoy estaba caminando.
Extraño es – dicen los periódicos –
y publican fotografías
y hacen hablar a los testigos:
que si tenía
hojas
que si
alargaba oscura sus raíces
y a quienes
señalaba
y alguien jura que oyó
un viento de hachas y de sierras
y alguien que amaneció con el cuerpo
lleno de astillas.
Anoche amaneció armado de piernas de pestañas
de
cabezas
y muchos lo golpeaban
y otros graban a cuchilladas
palabras torcidas en su tronco
o enmudecen
y salen corriendo despavoridos
cuando piensan
qué comerá.
Claro retrato de un sufrido solitario tal vez por abandono, expuesto en un gran poema lleno de nostalgia por soledad y la muerte del alma de referencia. Extraordinario y sentido su bello poema, amigo poeta.
ResponderEliminarMe gusto muchisimo! Admiro mucho la valentia del poeta que se atreve a poner ficcion en sus versos, pero siempre dejando un mensaje!!!!
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