Del otoñal sendero
los amarillentos matices
el rojo ocre
y la naranja palidez
me llevaron a la lengua del río
girando sobre pequeños islotes…
luego ayer
cuando al saltar entre recuerdos
el frío seco de todos los adioses
me arrugaron el alma…
aquel cauce seco
a vista del yermo paraje
es hoy
el campo por donde
ya no transita flor alguna…
por ahí
perdido y esquivo
me dejo llevar
por el caer de hojas
y los mil ocres que dibujan
esta otoñal pradera…
Bello poema. Felicitaciones.
ResponderEliminarGracias Ernesto, un abrazo
Eliminarpor ahí
ResponderEliminarperdido y esquivo
me dejo llevar
por el caer de hojas
y los mil ocres que dibujan
esta otoñal pradera… BELLO