Muchos recuerdos
me han venido papá.
Tu buen carácter
tus ocurrencias
tus canciones
y enseñanzas sin fin.
Tu fortaleza fue la paz
los valores tu prioridad
la ética un gran valor.
Mientras evoco tu nombre
se aclara mi pensamiento.
Recuerdo cuando solos
compartimos la vida
y me atendías
mejor que una nana.
Nunca me faltaste
con un suculento desayuno
que con mucho amor y esmero me servías.
Todo por darme buenas enseñanzas
que sea gentil y creativa
pues por eso
aunque no sabía cocinar
un banquete inventado
yo te servía.
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