El chocolate sobre la repisa
un
café humeando en la candela
mientras
la cocina vacía
era
el esqueleto de una casa
en la
que las voces
se
habían marchitado ya …
Sin
ruido alguno
los
cansados pasos
escalera
abajo
eran pálidas
sombras
que
si apenas se mostraban
contra
los muros secos
de
las paredes…
La
entrepuerta quedaría abierta
hasta
que la madreselva
cubriese
cada resquicio…
Allá
la casa vacía
en aquella
lejana esquina
de
una ciudad baldía…
14.10.2024
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