No le diré a la guerra que la pienso
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como una instancia cierta de la vida.
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No ofreceré a mi mente una salida
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que justifique el odio
más intenso.
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¡Ay, noche triste tan oscurecida
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para el que sufre solo
e indefenso!
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¡Casa quebrada, espíritu en suspenso,
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niños que lloran su
madre perdida!
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¡Basta de guerra! ¡Basta del ascenso
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del inhumano Marte y
su estampida
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que crece y crece en este mundo tenso!
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¡Alcen sus voces todos!
¡Acogida
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de plenitud humana! ¡Allí
condenso
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esta esperanza, de emoción transida!
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