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Tu risa, como una
rosquilla dulce se eleva en la tarde
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enfrentándose al
apático sol de este junio limeño
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y pinta árboles a
estas casas sin techo,
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sin estrellas y sin
cielo, donde los días no cambian
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Tu risa, como un anillo
de luces
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es el sonido grato que
se escapa a la tarde
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haciendo asomar a este
sol ya maduro y sorprendido
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más escéptico que
nunca hoy
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Tu risa morena,
pequeña, infantil,
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pone hoy campanas a
tus juegos
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Tu risa, que intentas
frenar
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pero que sale a
borbotones
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es un río sin diques,
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tiene el sonido de la
mañana
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es el canto de la
esperanza
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Tu risa, despierta
ternuras a este día,
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y se pone a lamer como
un perrito
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días adoloridos de
precios
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Tu risa trenza de pan,
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leche con miel,
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es la tregua
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en esta guerra de
pobreza
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que no acaba
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En “bajo esta cúpula de azul
índigo”
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