Llevo y detengo unas frases que – guturales -
|
Jamás serán tuyas - nunca
en la cerrazón del círculo -
|
Seguro que he de soltarlas al trasluz de la
luna gris
|
Cuando los vientos se duelan en las terrazas
|
Tal vez - lo repito - tal vez
|
Al abrirse cualquiera de estas flores de
primavera
|
Bajo la cascada de un alegre y verdeado
matorral
|
En la cerca de enfrente
|
O en aquella mañana en que sortees tu suerte
|
Esperando que el alba cruce por tu ventana
|
Será entonces el momento justo - así será -
|
Para escuchar estas frases cual colorido
cántico
|
Para acompasar las horas que dejas grabadas
|
Entre las hojas ya agotadas de un inédito
instante
|
Ven ahora a repetirme lo que quieres escuchar
|
A repetir conmigo la misma canción
|
Es que acaso no te asombra nombrarme en tus
versos?
|
Es que acaso hay un derrotero distinto por el
cual perderse?
|
Mejor
silencio - acallemos la distancia -
|
Deja que mis pasos se encuentren con las
paredes
|
Deja que mis brazos golpeen las nubes
|
Deja que el color desaparezca detrás de la
puerta
|
Entonces comprenderás la aguda voz de mis
palabras
|
Entonces saltarán las bardas negras
|
En aquel vivo rojo de la sangre
|
Entonces se agotarán sus gotas en algún
oscuro paraje
|
Con esta entrañable melodía
|
Que interpreto con aguda voz…
|
Buenos versos
ResponderEliminar