Aún se oye el estruendo
de los disparos de la guerra
en las montañas
como se oye aún los gemidos
del amor de los cuerpos
que se desnudan y aman
en los lechos de la ciudad
que en medio de la guerra
se enfrentan a una dulce batalla
como la que deberíamos tener
y no esa que engendra muertos
con la que se siembra la tierra
aún en medio de la guerra
hay que escribir el amor
desde sus trincheras.
de los disparos de la guerra
en las montañas
como se oye aún los gemidos
del amor de los cuerpos
que se desnudan y aman
en los lechos de la ciudad
que en medio de la guerra
se enfrentan a una dulce batalla
como la que deberíamos tener
y no esa que engendra muertos
con la que se siembra la tierra
aún en medio de la guerra
hay que escribir el amor
desde sus trincheras.
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