DESPUNTA el día
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Pulsa
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En arcilla buena
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En arcilla blanda
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Libera su mies contenida
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Hasta sentir la tierra palpitar
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Palpitar
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Se triscan los terrones
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Se aroman los campos
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El agua amamanta los surcos
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Despierta la esencia dormida
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Y brota de cada hendidura
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La exaltación incontenible de la vida
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Y EN CADA PARCELA ALUMBRA EL AGUA
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EN ESTAS horas lentas
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Que aún no llevan nombre
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Hay un olor a madre que recorre mi cuerpo
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y perfuma mi espalda
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En estas horas lentas
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latidos quedos
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despiertan mis mañanas
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Mientras el río canta
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Un tierno susurro
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Va cuajando en mis entrañas
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Me brota con fuerza desde adentro
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Se prende a mis brazos
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Y sé de la dulzura
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Cuando el viento
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Cimbra
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La espiga preñada
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Libro:
La Siembra del Corazón.
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