Con su cansino paso
desvaneció
pendientes y cuestas…
Mirando la
luna
deshizo los
muros
en desatino cruzó
todos los confines
dejando que
las estrellas
brillasen
incandescentes
haciendo de
las aguas un derrotero…
En su
intermitente deambular
descubrió el
bello rostro de ninfas
de musas
aquellas
imposible olvidar…
No hizo por
tierra alguna
ni cultivó
flor agreste
tan solo con
su lento andar marchó
fijo en el
camino
obsesivo en
cada paso…
Llegado a las
horas tardías
al oscuro
espacio de los escondrijos
al juego de
los vientres
de los
delirios
en donde la
lucidez es ajena
extraña piel…
Perdido en
profundo foso baldío
enterró sus
huesos
y otra vez
sobre sus
pasos
fue tras un comienzo
acaso borrado
bajo un sol de sombras y silencios…
Porque de silencios se llenó la vía
porque de sombras
se oscureció el futuro…
Los pasos se hicieron más cortos
las huellas más densas
ciego en vehemencias
dejó una rama sin flor
un epitafio
un final…
Los pasos se hicieron más cortos
ResponderEliminarlas huellas más densas
ciego en vehemencias
dejó una rama sin flor
un epitafio
un final…